Estamos llegando al fin de un año complejo, un año místico por donde se le mire: desde su estatus de bisiesto hasta el inicio de una nueva década.  Alimentado con la esperanza de un nuevo año y de la prosperidad deseada, el 2020 desde su comienzo dió sensación de cambio. De acontecimientos que traerían transformaciones y generarían un precedente en la historia de la humanidad.

El 2020 se recordará como el año en que vivimos la más grande de las pandemias a nivel mundial. El virus que llegó desde el gigante asiático y «hackeó» el comportamiento de todos los habitantes de este planeta. Interrumpiendo todas las formas de interacción, desde las sociales a las económicas.

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Asteco no fue ajeno a este fenómeno y mucho menos nuestros clientes y colaboradores. Los rezagos económicos que se preveían como fenómeno colateral debido a la pandemia y a las nuevas praxis de relacionamiento nos obligaron a buscar herramientas con las cuales pudiéramos continuar con nuestra misión empresarial y social. Y así mitigar las implicaciones económicas que un evento de estos precedentes (muy pocos) y de esta magnitud nos podían generar.

Fue entonces cuando decidimos apostar por el acompañamiento a nuestros clientes de manera virtual y a través del Instituto Asteco creamos un plan de capacitación constante, que incluía capacitaciones tipo webinar con inscripción abierta y también para clientes puntuales. 

Este fue el primer paso para crear nuevas estrategias de asesoría técnica. Potenciando a través del impulso de la necesidad, algunas que veníamos construyendo con anterioridad.

Logramos dictar más de 124 horas de capacitación virtual y mantener un contacto constante con nuestros clientes a través de la virtualidad. Cumpliendo con los protocolos de salud que la situación actual exige, pero siempre con la mentalidad de contribuir en la continuidad de la rueda productiva y la reactivación económica.

Adicional generamos herramientas digitales que nos acercan cada día más a niveles mucho más técnicos y efectivos en cuanto a la solución de problemas industriales.

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Pero todo esto no hubiera dado los resultados que ahora visualizamos sin la compañía y la aceptación de nuestros clientes, proveedores y colaboradores. Fueron más de 1800 asistentes a nuestros cursos webinar durante todo este año. Sumado a la disponibilidad y la utilización de nuestros recursos de asesoría técnica. Recordando también a nuestra fuerza asesora. La cual siempre con disposición, integridad y fundamentos técnicos, afrontó los cambios generados por la situación actual. Encaminándose a continuar contribuyendo con la nueva dinámica económica sin perder de vista el horizonte institucional.

Es por esto que queremos agradecer a todos los que este año nos ayudaron a solventar y salir adelante en este proceso de reconstrucción e innovación.

A nuestros clientes que son nuestra razón de ser. Nuestros colaboradores que nos han ayudado a ser cada día una empresa reconocida en el sector metalmecánico. Y nuestros proveedores que nos han acompañado con generosidad, calidad y amistad.  

De igual forma gracias a toda la familia Asteco. Con tenaz sacrificio y ardua dedicación logramos mantener unión laboral y social, cuidando de cada uno y de los otros.

Queremos seguir en este nuevo año siendo parte activa de sus procesos productivos. Queremos acompañarlos en todos los proyectos que se planteen para el 2021. Siempre pensando en que la unión industrial nos permitirá solventar cualquier inconveniente. Cualquier adversidad que se presente tanto a nivel económico, ambiental o social.

Nuevamente muchas gracias a todos los que estuvieron con nosotros todo este año. Que el próximo año lo llevemos con la misma certeza y compromiso que el que pronto terminará.

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