En Colombia, el desabastecimiento de gas natural es una preocupación creciente que amenaza con afectar significativamente a la industria del país. A partir de enero de 2025, Colombia comenzará a importar gas natural para suplir la creciente brecha entre la demanda y la producción local decreciente.
Esta transición plantea desafíos serios, ya que el gas importado supondría un valor mayor, que se vería reflejado en el consumidor final. Adicional Colombia en el momento presenta un problema de infraestructura que implicaría otro problema, además de la necesidad de inversión para mejorar la distribución desde puertos y almacenamientos, al interior del país, que es donde se concentra el mayor consumo del mismo.
El impacto en la industria colombiana será considerable, los costos de producción para las empresas, especialmente en sectores industriales con alto consumo energético como el acero, el cemento, la cerámica, el vidrio y la química, se incrementarán sustancialmente. Este aumento en los costos operativos puede reducir la competitividad de las empresas colombianas en el mercado global, haciéndolas susceptibles a disminución de capacidad productiva, rentabilidad y calidad.
Para mantener los márgenes de rentabilidad, para generar sostenibilidad y permanencia en el mercado, acogiéndonos a una solución simple, sería el aumento de los precios de venta, tanto de producción del gas, como de venta de productos de las empresas consumidoras. Esto supondría un duro golpe a la economía colombiana, la cual en la actualidad esta pasando por un momento complicado.
Para mitigar estos desafíos y asegurar que la industria colombiana no pierda su competitividad, es crucial que se tomen una serie de medidas estratégicas:
Inversión en Eficiencia Energética: Colombia debe fomentar estrategias, herramientas e inversión en el uso de tecnologías que pretendan mejorar el consumo energético. Incentivando la modernización de la industria, el repotenciamiento y el aumento de la confiabilidad de los procesos, que garantice no solo la buena utilización, sino además el aumento de la vida útil de los mismos, podríamos disminuir la intervención, el provisionamiento, los procesos de reposición y por ende aumentar la eficiencia energética, disminuir el impacto ambiental y la necesidad de fuentes energéticas, que genera los procesos productivos y de mantenimiento.
Diversificación de Fuentes Energéticas: la inversión en fuentes energéticas renovables se ha convertido en el foco estratégico mundial, no solo debido a los problemas de abastecimiento recientes tanto para el consumo comunitario, como para el consumo industrial, si no adicional, por la alta huella ambiental que fuentes de energía fósil generan. Ya en Colombia se ha iniciado, con obvios problemas de ejecución, programas de aumento de campos de paneles de energía solar, con el fin de disminuir la dependencia de las formas de energía convencionales de suministro de energía y garantizar la disponibilidad permanente que garantiza la continuidad de las actividades industriales.
Desarrollo de Infraestructura de Importación: Como lo hemos mencionado, uno de los tropiezos que puede tener el país para la importación de gas, son los sistemas de distribución, en especial al centro del país. La infraestructura en una gran parte existe, pero esta se encuentra o en malas condiciones operacionales y de actualización o vandalizada, terminales de gasificación, de transporte, de control, deben ser actualizados para mejorar la eficiencia de la distribución y la confiabilidad en el proceso, sin incurrir en aumento de precio por problemas logísticos.
Políticas de Incentivo y Regulación: El gobierno colombiano debe implementar políticas que apoyen la transición energética y ayuden a las empresas a adaptarse a los cambios. Esto incluye el establecimiento de normativas que promuevan el uso eficiente de la energía y ofrezcan incentivos a las industrias para adoptar tecnologías más limpias y eficientes.
Fomento a la Innovación y Competitividad: La industria colombiana necesita adaptarse a las nuevas realidades del mercado global. Invertir en investigación y desarrollo para fomentar la innovación y mejorar la competitividad es crucial. Además, crear un entorno favorable para la inversión en nuevas tecnologías puede ayudar a las empresas a mantenerse competitivas a pesar del aumento en los costos de energía.
Debemos ver los posibles problemas de abastecimiento de gas natural en Colombia, como una oportunidad para reorientar y fortalecer el sector energético del país. Adoptando estrategias que mejoren la eficiencia y la utilización energética, regulando las formas de generación energética que reduzcan el impacto ambiental que estas generan, desarrollando estructura e industria, fortaleciendo la economía productiva del país. Hay que afrontar los desafíos actuales, volviéndonos fuertes y competitivos a nivel global, para avanzar hacia la prosperidad social.
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